Era imposible que supiera
quien podía llamar.
sonó el teléfono y yo levante
el auricular.
y aquella voz acariciante
dijo escucha, no me cortes
estoy sola y no tengo a
nadie que quiera hablar
conmigo
y a esta horas...
yo miré el reloj y estaba a
punto
de colgarte pues tenia
razón
pero algo senti en ese tono
suplicante que me interesó
¡ que va ¡ me dije interés
profesional, le dije
¡claro! no tengas cuidado
bombón ¿qué puedo hacer
por ti?
y me contestó
-te lo agradezco tanto, ¿sabes?
siempre sentí necesidad de
decirle esto a alguien así
que sin querer marqué tu
número al azar.
porque tengo la fantasía, sí,
de acariciarte esta noche
por detrás de las piernas y
no parar hasta
llegar a tus caders y luego
desabrochar despecio el
pantalón.
yo pegué un salto y dije –
corazón
¿dónde has estado tanto
tiempo?
dime a dónde he de volar
para ser ¡ajá! tu fantasía
realidad.
Me aseguró que por
supuesto
lo iba a averiguar
pero antes de besarme el
cuello
me iba a mordiquear el
lóbulo
derecho de la oreja y yo
sentí, caricias a través de la
bocina para mí.
Me comentó que le excitaba
no saber
mi nombre cuando yo casi
le confieso
pues...me llamo fernando
pero en lugar de esto le dije
yo soy lo que necesitas.
Y se río – Pero antes deja
que te diga otras cositas.
y me contó con detalle
como se tendia en la
cama.
yo me contuve de arrancarme
la
pijama y comencé a morderme
el dorso de la mano
imaginando
como abrasaría sus labios.
Hasta aquí todo tenia tonos
de una erotica locura
cuando gritó que se lo
hiciera entre basura y
sugerí:
-dame tus datos nena,çdámelos siquiera y haremos
lo que quieras dontu tu
prefieras.
y pensé que el caso podría
requerir toda mi astucia
pero ella comenzó a
decirme cosas sucias y a