Nació como un lamento
en el rincón que el hombre destina al
sentimiento.
Y rompiendo toda previsión,
se hizo grande como el universo en
expansión.
Así está hoy la sensación que tú estás
en mí.
Como el jardinero del jardín
cuidas tú que mis árboles den flores,
y a los dolores del vivir,
quitas la agonía. Del hielo al agua
hasta el vapor,
así está hoy la sensación, que yo soy
sólo tú.
Eres el camino y yo el andante,
sin otro rumbo que adelante.
Y estando atento en este instante,
sin otro tiempo que el aquí y ahora,
soy una sirena que cayó en la fuente
del amor.