Vengo a robarte la siesta con la manilla del desván,
con toses de carretero vengo vendiendo cal,
y es que traigo colmo en los cajones
de hollín de mis pulmones, de agujas de tejer,
chispas del cruzar de cables de ojitos miserables
que no quisieron ver,
Vengo de trenzar esparto para la reja de un penal,
despeinando a la tristeza, que está recién pintá,
y es que guardo su lamento quedo
goteando entre los dedos en cántaros de cinc,
y en zurrones de miseria, bombillas de la feria,
perfume de alperchín,
Y me voy con la camisa rota
porque me he hecho una bandera
con guirnaldas de guijarros,
plumas de palomas negras,
que el verso que le di al aire
muere de cualquier manera,
y en el cielo de tu boca
se lo comerá la niebla.
Vengo a herrar a las orugas para después condecorar
a las abejas que no venden la miel de su panal,
y es que traigo nubes de rabieta que inunden las macetas
de ganas de encallar,
lagrimitas traicioneras, tiñendo las bañeras...
...cuchillas de afeitar
Y me voy con la camisa rota
porque me he hecho una bandera
con guirnaldas de guijarros,
plumas de palomas negras,
que el verso que le di al aire
muere de cualquier manera,
y en el cielo de tu boca
se lo comerá la niebla.