Sirvió un menú muy complicado
entre narcisos y playboys
que vomitaba la pantalla argentina,
aflojando el almidón del cogote
para poder tragar.
Dio la receta rebuscada,
de una torta color caca
para el té poder acompañar,
aflojando el cinturón al chancho
para no reventar.
Y yo me quemo hasta los dientes,
mi manjar está caliente,
se cocinó la realidad.
Vamos todos a la mesa,
que esta noche vamos a cenar
buseca y vino tinto.
Esta noche, nena
te invito a morfar.
Pidió postre con cereza,
delicada la burguesa,
y anunciaba un lindo comercial,
que donaría las sobras
y los huesos a la prosperidad.
Contrataron a dos chinos
pa'endulzar el apellido,
ay, divina alta sociedad!
que eructaba con la panza llena
de felicidad.
Y yo me quemo hasta...
Esta noche Mirtha, te invito a morfar.