Oye tú, no finjas demencia
que hoy tendrás que hacer penitencia
guárdate esas flores,
¡no te creo ni una palabra más!
Vieras que divino se siente,
tengo un cuerno grande en la frente
no tenías motivos
pero ahora los tendrás.
Si vieras que mortificada estoy por tí
si hay muchos tantos tras de mí.
Y ya ves, ya no, ya no
quiero verte, vete, ya no,
no quiero verte más.
Ya no, ya no, ya no
quiero verte, vete, ya no,
no quiero verte más, ya no
aaah, ahhh.
¿Para qué llorar por tan poco?
la verdad, me abriste los ojos.
No hay ningún problema,
solo vete por favor.
No supliques más de la cuenta
si debería darte vergüenza
no tiene sentido
demasiada explicación.
Te me caíste de mi pedestal, ya ves
y nunca más te subirás.
Y ya ves, ya no, ya no
quiero verte, vete, ya no,
no quiero verte más.
Ya no, ya no, ya no
quiero verte, vete, ya no,
no quiero verte más, ya no.
Te devuelvo cada beso que me diste
y también la noche que me prometiste
que nunca, que nunca, que nunca,
que nunca me ibas a dejar.
Date media vuelta y cierra bien la puerta
que de tí, ya nada, nada me interesa.
No quiero, no quiero, no quiero,
ya no quiero verte más.
Y ya ves...
