Un Alma en Pena

Lucía Mendez

En el año 1627, en tiempos crueles de la Santa Inquisición
Unos sacerdotes infames condenaron a muerte a una mujer por amor
En la hoguera se oye un grito, una amenaza que se vuelveUna venganza, una promesa entre el fuego y dolor
Poco a poco va cayendo el cuerpo al fuego, calcinado
Condenado a morir así en el nombre de Dios

Es un alma en pena que va arrastrando cadenas
¡Qué condenas!
Es un grito de amor
Es un alma en pena que va arrastrando cadenas
¡Qué condenas!
Por las noches entre llantos, entre quejas
Todo el pueblo entero escucha lo que hacen lunas muchas
Hace más de cuatro siglos pasó

Se oyen voces, ruidos, pasos, risas, cantos, gritos
Quejas de alguien que murió por amor
Entre llantos y entre suspiros
De alguien que arrastra herido por el suelo un dolor
Un alma buena, enamorada, un alma en pena, ilusionada
Busca todo, encuentra nada y quiere lo que dejó
Por las noches viene y va
Habla, ríe, baila, canta, llora, grita, ama y canta
Busca lo que perdió por amor
Por amor

Es un alma en pena que va arrastrando cadenas
¡Qué condenas!
Es un grito, es un llanto
Es un alma en pena que va arrastrando cadenas
¡Qué condenas!
Por las noches entre llantos, entre quejas
Todo el pueblo entero escucha lo que hacen lunas muchas
Hace más de cuatro siglos pasó

Es un alma en pena que va arrastrando cadenas
¡Qué condenas!
Es un alma
Es un alma en pena que va arrastrando cadenas
¡Qué condenas!
Es un alma, es un alma
Es un alma, es un alma buena
Es un alma en pena que va arrastrando cadenas
¡Qué condenas!

Eso en el año 1627 sucedió, ¡ay, ay, ay, ay!

Es un alma en pena que va arrastrando cadenas
¡Qué condenas!
Por las noches entre llantos, por el pueblo
Es un alma en pena que va arrastrando cadenas
¡Qué condenas!
¡Qué condenas!
Y aún escucha la gente del pueblo el grito aquel
Muerte cruel por amor