Hoy me vino la gana que no las musas,
hoy no tengo pretextos ni disculpas
para cantarte a ti,
para escribirte un verso y descolgarte desde aquí
hasta las ganas de la mañana ya por venir.
Hoy primero del segundo del año
mientras esta mujer rompe el espacio
para inventarse al fin,
para mirarla toda en el silencio y de perfil,
tomo tus manos como escenario para existir.
Y es que no importa que digan
que esta trillado
hablar de amor, que maldigan
si no han probado
la noche en sus brazos de sol.
Se detiene el reloj entre nosotros,
caen las diez que resbalan por sus hombros
y se cuela la luz
que se enreda en tu pelo pero la liberas tú.
Oro y diamantes
por un instante de tono azul.
Y es que no importa que digan
que esta trillado
hablar de amor, que maldigan
si no han probado
la noche en sus brazos de sol.